Cada año 391 millones de toneladas de plástico se producen en todo el mundo, porque es barato, ligero, resistente y duradero. La mayor parte se deriva de fuentes no renovables como el petróleo o gas natural. Más de 600 mil millones de bolsas de plástico producidas anualmente en todo el mundo, ¡requieren hasta 2 mil millones de litros de crudo! Pero lo peor de todo esto es que el plástico es tóxico. Aproximadamente 6 millones de toneladas de plástico terminan en el mar cada año, y tienen consecuencias gravísimas. Estos residuos de plástico se descomponen lentamente en partículas cada vez más pequeñas. ¡Las bolsas de plástico tardan 20 años para degradarse, las botellas de plástico 450 años y las redes de pesca increíblemente tardan unos 600 años!
Ahora existe seis veces más plástico que plancton en los océanos. Dónde gigantescos basureros flotantes se han acumulado en remolinos marinos, la proporción de plástico en comparación con el plancton es de 40: 1. Durante los procesos de desintegración, las sustancias tóxicas contenidas en plástico son consumidas por las criaturas marinas.
Consejos prácticos para reducir el uso de plástico:
- Reduce el consumo de productos desechables..
- Compra conscientemente: Prefiere materiales naturales y duraderos; no compres cualquier producto cosmético con microplástico (por ejemplo los encontrados en peelings corporales o pasta de dientes)… más
En la cadena alimenticia con el aumento del tamaño de los peces la acumulación de toxinas crece con el tiempo terminando en nuestras mesas. Por esta razón reduce las bolsas desechables, utiliza bolsas reutilizables de tela o papel y utiliza vidrio en lugar de recipientes de plástico. Puedes encontrar nuevas recomendaciones en nuestro folleto El Plástico—¡LLegó La Hora de Limpiar!.
Enfoques de solución que seguimos con interés: