La emisión de radiación de microondas de alta frecuencia interfiere con la red integrada electromagnética natural del agua. A través de esta red el agua es capaz de absorber, almacenar y transferir información. Los enlaces electromagnéticos del hidrógeno, y en consecuencia la estructura del agua, son desestabilizados y la microbiología del agua se desequilibra cuando es irradiada con microondas.
Por lo tanto, a través de la tecnología de comunicaciones móviles de hoy en día usada mundialmente está comprometido el equilibrio de la totalidad del agua de la Tierra y de todos los organismos vivos. Esto tiene unas drásticas consecuencias, porque sin agua no hay vida. El cuerpo humano está formado por más de 70% de agua, en los recién nacidos el porcentaje de agua es casi del 90%. El agua no sólo calma nuestra sed. En el cuerpo humano juega un importante papel en la transferencia de información en las células, mantiene los procesos metabólicos, es un agente de unión para las estructuras celulares y necesaria para la evacuación de productos de desecho y toxinas. Todas estas capacidades naturales del agua son alteradas por la tecnología de microondas –con las correspondientes consecuencias para la salud del hombre y la naturaleza.