Cada vez es más clara y frecuente la evidencia de que la radiación de los teléfonos móviles, y en particular de la tecnología 5G, es todo menos que inocua para los seres humanos y que los valores umbral actuales no son suficientes para proteger la salud.
Por ejemplo, el 10 de enero de 2023, se publicó un estudio de un caso sueco1)Lennart Hardell, Mona Nilsson (2023). Case Report: The Microwave Syndrome after Installation of 5G Emphasizes the Need for Protection from Radiofrequency Radiation. Ann Case Rep: 8: 1112. https://www.gavinpublishers.com/assets/articles_pdf/Case-Report-The-Microwave-Syndrome-after–Installation-of-5G-Emphasizes-the-Need-for–Protection-from-Radiofrequency-Radiation.pdf en «Annals of Case Reports», una revista científica internacional revisada por pares, que demostró que la radiación 5G causa síntomas típicos del llamado síndrome de las microondas2)Yael Stein, Iris G Udasin (2020): Electromagnetic hypersensitivity (EHS, microwave syndrome) – Review of mechanisms. Environ Res. 2020 Jul;186:109445. doi: 10.1016/j.envres.2020.109445. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32289567/. La pareja examinada en el estudio del caso, un hombre de 63 años y una mujer de 62 años, experimentaron problemas de salud como fatiga constante, problemas para dormir, mareos, efectos emocionales como irritabilidad y depresión, hemorragias nasales, zumbido en los oídos, síntomas de problemas cardíacos, problemas de memoria y problemas en la piel sólo unos días después de que una estación base 5G entrara en funcionamiento en el techo de su casa. Todos los síntomas desaparecieron en 24 horas (en el hombre) o 1-3 días (en la mujer) después de que la pareja se mudara a otro piso con niveles de radiación más bajos.
El estudio del caso también mostró que, contrariamente a lo que afirman los políticos y la industria, la conversión a 5G aumenta significativamente la exposición a la radiación. Incluso antes de que se pusiera en funcionamiento la antena 5G, se habían instalado estaciones base 3G y 4G en el techo, pero cuando se encendió 5G, la exposición a la radiación aumentó 188 veces (de 9 milivatios/m2 a un máximo de 1.690 milivatios/m2). Mona Nilsson, directora ejecutiva de la “Swedish Radiation Protection Foundation” y coautora del estudio, dijo al estadounidense “The Defender”: “No hay estudios que demuestren que esta tecnología y la exposición creciente y común a las estaciones base 5G y 4G en los niveles permitidos por el gobierno sea segura. Al contrario, los estudios han demostrado en forma repetida y convincente un mayor riesgo al síndrome de las microondas y al cáncer, a niveles que están muy por debajo de los niveles que el gobierno y las empresas de telecomunicaciones afirman falsamente que son seguros.“3)https://childrenshealthdefense.org/defender/5g-radiation-microwave-syndrome-symptoms/
De manera alarmante, la industria de las telecomunicaciones intentó censurar el artículo sobre este estudio del caso cuando se publicó por primera vez en la revista médica «Medicinsk Accessin» en la primavera de 2022. Un representante de Ericsson, el proveedor de la infraestructura 5G líder en el mundo y la organización paraguas de 1.200 empresas de tecnología, es decir, todas las principales empresas de telecomunicaciones de Suecia – escribieron al editor de la revista sueca instándolo a “retirar el artículo”, explicaron los autores del estudio del caso. Numerosos suecos se pusieron en contacto con la «Swedish Radiation Protection Foundation» e informaron de problemas de salud después de que se instalara una antena 5G en su vecindario. “Basándonos en las mediciones del incremento masivo de la radiación de 5G y lo que sabemos hasta ahora, podemos concluir que la 5G es muy peligrosa y debe detenerse,” dijo Nilsson.4)https://childrenshealthdefense.org/defender/wireless-technology-electromagnetic-radiation-humans/
Los sistemas biológicos se ven afectados significativamente por la comunicación inalámbrica
Un estudio revisado de parejas5)Julie E. McCredden, Naomi Cook, Steven Weller and Victor Leach (2022). Wireless technology is an environmental stressor requiring new understanding and approaches in health care. Front. Public Health, 20 December 2022. Sec. Radiation and Health. Volume 10 – 2022. https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fpubh.2022.986315/full publicado en «Frontiers in Public Health» en diciembre de 2022 concluyó que hay «una amplia evidencia» de que «los sistemas biológicos humanos se ven sometidos a una gran presión por la exposición a los dispositivos de comunicación inalámbricos cotidianos y a la infraestructura relacionada». Investigadores de Oceania Radiofrequency Scientific Advisory Association (ORSAA) and the Centre for Environment and Population Health at Griffith University’s School of Medicine and Dentistry en Brisbane, Australia, resumieron los resultados de 1.106 estudios experimentales y epidemiológicos que analizaron los efectos biológicos y en la salud de los Campos electromagnéticos y la radiación. Dos tercios de los estudios científicos examinados encontraron efectos biológicos significativos en la salud. Los científicos australianos escribieron que cientos de artículos encontraron efectos de los teléfonos móviles y la infraestructura de los mismos en los procesos biológicos básicos del cuerpo humano, incluidos, por ejemplo, daño a las proteínas, cambios bioquímicos y estrés oxidativo.
Otro estudio revisado por pares6)Junjie Huang, Sze Chai Chan, Veeleah Lok, Lin Zhang, Xu Lin, Don Eliseo Lucero-Prisno, Wanghong Xu, Zhi-Jie Zheng, Edmar Elcarte, Mellissa Withers, Martin C S Wong, NCD Global Health Research Group, Association of Pacific Rim Universities (APRU) (2022). Disease burden, risk factors, and trends of primary central nervous system (CNS) cancer: a global study of registries data. Neuro-Oncology, noac213, https://doi.org/10.1093/neuonc/noac213 https://academic.oup.com/neuro-oncology/advance-article-abstract/doi/10.1093/neuonc/noac213/6681116 publicado en septiembre de 2022 en la revista «Neuro-Oncology» por la Facultad de Medicina de la Universidad China de Hong Kong en cooperación con la Asociación de Universidades de la Cuenca del Pacífico también llegó a la conclusión de que el uso de un teléfono móvil , entre otros factores, debe estar claramente asociado con el desarrollo de tumores cerebrales primarios.
A menudo los efectos biológicos todavía se ignoran
En este contexto, cabe mencionar un estudio longitudinal7)Marloes Eeftens, Chen Shen, Jana Sönksen, Claudia Schmutz, Luuk van Wel, Ilaria Liorni, Roel Vermeulen, Elisabeth Cardis, Joe Wiart, Mireille Toledano, Martin Röösli (2023). Modelling of daily radiofrequency electromagnetic field dose for a prospective adolescent cohort. Environment International. 4 Januar 2023. https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0160412023000107 publicado en la revista “Environment International” el 5 de enero de 2023, en el que se examinó la dosis diaria de los campos electromagnéticos de alta frecuencia en el cuerpo de más de 6.000 adolescentes británicos durante un período de dos años (2014-2016). Si bien el valor en todo el cuerpo se mantuvo aproximadamente igual en el momento de la medición, los investigadores encontraron un aumento significativo del 32 % en el cerebro de los adolescentes después de dos años, especialmente en el lóbulo temporal. (Los lóbulos temporal y frontal es donde se desarrollan la mayoría de los tumores de glioblastoma). La razón principal del aumento fue el uso de sus teléfonos móviles por los adolescentes, con redes 2G aún principalmente en funcionamiento en el momento de la medición.
Los críticos, sin embargo, señalan que este estudio tiene claras deficiencias, especialmente porque los autores se abstuvieron de investigar los posibles efectos biológicos y de la salud. Esto puede tener que ver sobre todo con el hecho de que varios autores del estudio tienen conexiones con la industria de la telefonía móvil. Eileen O’Connor, cofundadora y directora de la «EM Radiation Research Trust» en el Reino Unido y miembro de la junta de la Allianza Internacional EMF, describió el estudio como «apto para la industria». Dijo que «Las palabras clave del artículo son ‘estimar y suponer’ con el foco puesto en la tasa de absorción específica (SAR, en inglés), que solo se refiere a las emisiones de los teléfonos móviles que pueden calentar el tejido biológico». Muchos expertos confirman que el SAR no es bueno como método de medición de los efectos de los teléfonos móviles en humanos. En 2013, un equipo de investigadores evaluó el SAR como un método para cuantificar los posibles efectos biológicos de los campos electromagnéticos y concluyó que «el SAR en realidad se refiere a los efectos térmicos, mientras que la gran mayoría de los efectos biológicos registrados de la radiación ambiental no ionizante creada por el hombre son no térmicos.”8)Dimitris. Panagopoulos, Olle Johansson, George L. Carlo (2013). Evaluation of Specific Absorption Rate as a Dosimetric Quantity for Electromagnetic Fields Bioeffects. PLOS ONE. June 2013, Volume 8, Issue 6. https://journals.plos.org/plosone/article/file?id=10.1371/journal.pone.0062663&type=printable
References
↑1 | Lennart Hardell, Mona Nilsson (2023). Case Report: The Microwave Syndrome after Installation of 5G Emphasizes the Need for Protection from Radiofrequency Radiation. Ann Case Rep: 8: 1112. https://www.gavinpublishers.com/assets/articles_pdf/Case-Report-The-Microwave-Syndrome-after–Installation-of-5G-Emphasizes-the-Need-for–Protection-from-Radiofrequency-Radiation.pdf |
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↑2 | Yael Stein, Iris G Udasin (2020): Electromagnetic hypersensitivity (EHS, microwave syndrome) – Review of mechanisms. Environ Res. 2020 Jul;186:109445. doi: 10.1016/j.envres.2020.109445. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32289567/ |
↑3 | https://childrenshealthdefense.org/defender/5g-radiation-microwave-syndrome-symptoms/ |
↑4 | https://childrenshealthdefense.org/defender/wireless-technology-electromagnetic-radiation-humans/ |
↑5 | Julie E. McCredden, Naomi Cook, Steven Weller and Victor Leach (2022). Wireless technology is an environmental stressor requiring new understanding and approaches in health care. Front. Public Health, 20 December 2022. Sec. Radiation and Health. Volume 10 – 2022. https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fpubh.2022.986315/full |
↑6 | Junjie Huang, Sze Chai Chan, Veeleah Lok, Lin Zhang, Xu Lin, Don Eliseo Lucero-Prisno, Wanghong Xu, Zhi-Jie Zheng, Edmar Elcarte, Mellissa Withers, Martin C S Wong, NCD Global Health Research Group, Association of Pacific Rim Universities (APRU) (2022). Disease burden, risk factors, and trends of primary central nervous system (CNS) cancer: a global study of registries data. Neuro-Oncology, noac213, https://doi.org/10.1093/neuonc/noac213 https://academic.oup.com/neuro-oncology/advance-article-abstract/doi/10.1093/neuonc/noac213/6681116 |
↑7 | Marloes Eeftens, Chen Shen, Jana Sönksen, Claudia Schmutz, Luuk van Wel, Ilaria Liorni, Roel Vermeulen, Elisabeth Cardis, Joe Wiart, Mireille Toledano, Martin Röösli (2023). Modelling of daily radiofrequency electromagnetic field dose for a prospective adolescent cohort. Environment International. 4 Januar 2023. https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0160412023000107 |
↑8 | Dimitris. Panagopoulos, Olle Johansson, George L. Carlo (2013). Evaluation of Specific Absorption Rate as a Dosimetric Quantity for Electromagnetic Fields Bioeffects. PLOS ONE. June 2013, Volume 8, Issue 6. https://journals.plos.org/plosone/article/file?id=10.1371/journal.pone.0062663&type=printable |